Pasa que a veces te dicen que eres una pendeja y todo lo que has construido sobre cierta base de creer no serlo (tanto) se te viene al piso.
Pasa que a veces te das cuenta que es muy bueno cuando te rompen esas bases estúpidas sobre creer cosas que no son relevantes, y es lo mejor del mundo que te rompan los esquemas porque te re-analizas y te das cuenta de la estupidez que antes pensabas.
Pasa que a veces la base sobre la cual construías era algo absolutamente irreal y te caes porque aquella nube que te sostenía con su densidad, de tanto botar lluvia se deshace y te caes de espalda al suelo.
Pasa que a veces entre tantas metáforas se pierde el sentido literal de la frase.
Pasa que a veces las cosas que creías y sentías, realmente no las creías ni las sentías tanto y eso muchas veces te hace sentir muy bien como otras muy mal, pero simplemente es y así hay que sobrellevarlo.
Pasa que a veces la anciedad, los nervios, la sobreexigencia de una misma, el gusto de meterte en líos, y todo cuanto ello conlleva, te provocan un desorden hormonal terrible que te deja creyendo y sintiendo cosas que en realidad no son.
Pasa que a veces andas tan feliz por la vida sin tener una razón, aunque te digan que eres una pendeja, aunque creas que te vas a sacar 2 rojos sin nunca antes haber tenido ni uno solo ni siquiera en una pruebita corta sumativa, aunque te digan que nunca te van a querer ni se van a enamorar de ti, aunque te digan que eres una pendeja (sí, lo vuelvo a repetir), aunque tengas lejos a parte de la gente que más amas, aunque creas no haberte enamorado ni amado nunca, aunque creas que ninguno de l@s amig@s que tienes cerca en realidad son tal, aunque creas que la magia se fue a la mierda y nunca existió.
Pasa que a veces pese a sentirte feliz sin razón y creyendo toda esa mierda antes nombrada, de pronto, te das cuenta que aunque te lo digan no eres tan pendeja, y que cuando lo eres es porque te gusta también serlo y tener sólo 19 años y toda una vida por delante a tu elección (sí, me gusta tener 19 y hacer escándalos como la gente de 19), pasa que te entregan una de las dos notas que creías era un rojo y en realidad era un 63 (aunque es probable que la otra sí sea un rojo, y un rojo rojo, no un morado), pasa que aún así hay gente que sí me ha querido y se ha enamorado de mí (inclusive contra su propia voluntad), pasa que aunque te vuelva a decir otra persona que eres una pendeja, te sigues sintiendo tan bien, y vuelvo a repetir que me encanta tener sólo 19 (aunque ya son 20 en casi un mes más) y que si soy pendeja me gusta serlo porque me siento una pendeja linda y radiante, pasa que alguna de la gente que creías tener lejos vuelve a estar de pronto al lado tuyo cuando menos lo esperabas y eso te saca sonrisas, pasa que de pronto te recuerdan cosas y emociones y sentimientos y te das cuenta que efectivamente podrías decir que estuviste enamorado o que amaste (o inclusive que amas) o al menos que fuiste (y eres) muy feliz y eso te gusta, pasa que muchas veces tienes más amig@s que se preocupan por ti y te quieren de los que creías tener, pasa que a veces la magia que creías ya no existía aparece y te lleva a volar por toda la ciudad y sobre el mundo entero, pasa que la magia te manda señales ante tus ojos y como los tienes abiertos la disfrutas fabulosamente,
Pasa que si bien eras feliz sin todo aquello y no lo necesitas, eso te hace aún más feliz y radiante.